La dieta no carnívora es aquella cuya alimentación se basa, sobre todo, en el consumo de vegetales y frutas, sin ningún tipo de conservante, que no han fermentado y que, a diferencia del resto de dietas, por que los alimentos se toman como son, en la naturaleza. Así, se piensa que se mantienen todas las propiedades, sin añadidos químicos, sólo como provienen de la naturaleza.
Esta dieta se caracteriza por ser muy natural, donde se incluyen alimentos que son de la temporada y que no tienen productos químicos. Es una dieta que ayuda a que reduzcamos de peso, desintoxica nuestro organismo, es muy apetecible e higiénica. Además, se caracteriza por ser factible, ya que vamos a ahorrar trabajo y tiempo, a la hora de cocinar, ya que no tendremos que pelar, trocear, sazonar, cocinar o fregar los distintos alimentos, que consumamos.
También, esta dieta es conocida por que logra que tengamos una piel mucho más suave e hidratada, que nuestros dientes estén más sanos y nuestras uñas más fuertes; también, va a ayudar a nuestras funciones intestinales, lo que haya que tengamos menos posibilidades de sufrir estreñimiento, nos va a ayudar a reducir el riesgo de sufrir enfermedades cardiovasculares o problemas en el hígado o en el estómago.
En el desayuno: un vaso de leche desnatada y una manzana; a media mañana, un vaso de zumo de zanahoria, remolacha y apio.
A la hora de comer, toma una ensalada con lechuga, cebolla, tomate, hinojo, apio aliñado con aceite de oliva, zumo de limón, pimienta y sal; un plato de gazpacho y una pieza de fruta.
A la hora de merendar: una pera.
A la cena, una ensalada con brotes de soja, zanahoria rallada, alfalfa, cebolla y todo con aceite de oliva, sal, pimiento y zumo de limón. Con una pieza de fruta, de postre.