El apio está compuesto por agua en casi un 95%, lo que lo convierte en un alimento muy ligero e hidratante para nuestro organismo. Este alto contenido en agua hace que sea un plato muy digestivo. Una cualidad que junto a su bajo aporte calórico lo convierte en indispensable en cualquier dieta. Pero a esto debemos sumarle sus propiedades diuréticas y depurativas del organismo.
Ayuda a reducir el colesterol, es diurético, depurativo. Tiene muchas calorías y sólo aporta 16 calorías cada 100 gramos.