Cuantas veces hemos oído, leído, visto que el agua es la vitalidad y el núcleo de la dieta para adelgazar. Si es verdad que el cuerpo por estar constituido por mas de un 60% de agua requiere de este elemento diario, en un te, refresco, gaseosa, o incluso bebidas y frutas logramos obtener agua está en todas partes.
Beber dos litros de agua diariamente según el peso y la talla es lo mas importante para eliminar las toxinas del cuerpo y aun mas si se tratase de personas que se alimentan con productos con contenidos de colorantes y condimentos en grandes proporciones. El agua ayuda al riñón a desecharlos por medio de la orina y también lo vemos eliminados por medio de lagrimas o sudor.
Para ello es el saciar la sed puede ser un acción muy sencilla de hidratación y eficiencia funcional. La hiperactividad física lograra que expulsemos cantidades de agua en forma de sudor que debemos suplir con líquidos otra vez.
Existe una nueva dieta que es llamada “la dieta del agua” aunque es proclamada como una dieta para reducir kilos rápidamente es una forma absurda para morirse de hambre, provocarse mareos, cefaleas, y otras alteraciones con el uso excesivo y solo de agua.
Para valerse de una dieta aunque el agua sea generador de la desintoxicación primordial del organismo no es objeto de empleo para aplicar una dieta de reducción del peso corporal, para saber porque no seguir esta dieta como se propone en muchas publicidad solo esta el hecho de saber que el es agua es inolora, incolora, insípida, causa saciedad e hidratación pero no contiene ningún aporte calórico que valga la pena para una nutrición estable y diaria.
El agua única en las dietas es una de las dietas mas ridículas que se exponen ante personas que poseen un exceso de kilos, un engaño fatal y efectivo para lograr daño. El agua posee propiedades benéficas para la salud pero no si se pone en juego querer suplir las necesidades básicas en la alimentación como predominan algunas fuentes en la muy conocida “dieta del agua”.
El escaso consumo de agua puede asociarse a estreñimiento y deshidratación también como resequedad de la piel pero el consumir cantidades enormes de agua sobrepasando exageradamente los dos litros y medio que indican los médicos como saludables puede provocar adicción que se le conoce hoy en día como “potomanía” y desequilibrante en la concentración de electrolitos impidiendo el normal funcionamiento del cerebro, órganos y el metabolismo. El resultado puede ser manifestado como nauseas, convulsiones, calambres y coma.
Se recomienda no seguir esta”dieta del agua” y si se hace tener mas conocimiento acerca de sus ventajas lo cual esta muy cuestionado. Beber agua para la salud.