Los cereales integrales son los más recomendables, ya que poseen la fibra que hay en la cáscara de los granos. Además, poseen una gran cantidad de vitaminas, minerales, complejo B, tiamina, niacina, riboflavina y hierro, lo que hace que sean ideales para una alimentación sana.
Los cereales integrales no producen un aumento de peso, ya que, aunque poseen un gran aporte calórico, las calorías que harán que aumentemos de peso, serán las grasas y los azúcares. Los calorías que nos dan los cereales integrales se metabolizan en el hígado y se transforman en glucosa, que será la causante de que nuestro cuerpo tenga energía.
No es energía rápida, como en el caso de los azúcares, sino que es energía sostenida. Así, cuando comemos cereales integrales, todos los días, nos vamos a sentir satisfechos, mucho más rápido y durante más tiempo, sin que tengamos que sufrir de residuos grasos en nuestro organismo. Muchas personas que se ponen a dieta cometen el error de sustituir los alimentos refinados por los integrales, por que piensan que tienen menos calorías y, piensan que van a poder tomar la cantidad que quieran.
Es cierto que hay diferencias en las cantidades de minerales, vitaminas o fibra; pero, aportan la misma cantidad de energía, o sea, la misma cantidad de calorías, por lo que no nos van a ayudar a adelgazar o a perder de peso. De todas maneras, si sufrimos de estreñimiento, nos van a ayudar a mejorar nuestro tránsito intestinal. 🙂
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